16/10/2015

Noticias desde Rusia

Llegada escalonada a terrenos poco húmedos
Las tibias temperaturas a finales del invierno han contribuido a la precocidad de la fusión de la nieve desde principios de marzo. Así, en la región de Vladimir la capa de nieve ha desaparecido en las áreas abiertas a mediados de marzo y en las zonas arboladas a principios de abril. Para estas últimas zonas, la humedad y sus reservas de agua en el suelo eran, por tanto, reducidas, lo que no es favorable para la microfauna y el humus forestal. Las primeras llegadas de becadas migratorias se observan hacia el 20 de marzo, pero a partir del 7-8 de abril ya se observan números más significativos en Rusia Central (Moscú, Vladimir, Tver, Yaroslavl, Ivanovo...). En general, en la mayoría de las regiones, los números de contactos en croule durante las noches de observación fue menor que en años anteriores, un fenómeno que se explica por un mayor escalonamiento en la llegada de las becadas.

La primera quincena de mayo, que resultó bastante fresca, registró lluvias importantes que ayudaron a reducir en parte el déficit de agua, tanto en las áreas de marjales como en los bosques.

Temperatura ideal en el momento de pico de eclosión

La última quincena de mayo fue particularmente favorable para las aves y sobre todo durante el período de pico de la eclosión con temperaturas ligeramente por encima de la media. Durante una misión en Rusia, en las regiones de Moscú e Ivanovo a finales de mayo de 2015 detectamos, no obstante, que los suelos forestales se mantuvieron relativamente secos. También en este período sensible para los polluelos, la primera quincena de junio fue de nuevo fresca y húmeda, pero esto no ha sido perjudicial para los pájaros.

Tengamos en cuenta que una primera puesta completa que con 4 huevos era
encontrada por un cazador en la región de Ryazan el 27 de abril.

Un verano húmedo y fresco

El verano de 2015 ha estado marcado en la Rusia europea por temperaturas por debajo de lo normal en junio, julio y agosto, por lo que se trata de un verano frío y húmedo, atípico, el experimentado en estas regiones con clima continental. Estas condiciones han sido a priori favorables para las aves limícolas y particularmente para la becada. La croule se ha prolongado hasta mediados de julio en Rusia Central. Las condiciones para la anidación de mayo a julio, incluso en agosto, han sido bastante buenas y es probable una proporción algo mayor de segundas nidadas. La muda también podría haberse desarrollado en buenas condiciones a mitades del verano. Algunas becadas fueron capturadas a principios de agosto, de noche en las áreas abiertas de la región de San Petersburgo y Saransk. La frescura y la humedad en estas praderas han provocado la presencia temprana de becadas en estas zonas de alimentación en áreas abiertas.

Septiembre, esperando a las precipitaciones

Por el contrario, la ausencia de lluvias desde principios de septiembre y a lo largo de este mes, no ha dado lugar a ofrecer oportunidades reales de alimentación de las aves por la noche: Aún así, algunas aves se observaron por la noche en los lugares habituales de anillamiento durante las dos primeras décadas del mes.

Retraso en la migración otoñal

Los equipos de anilladores rusos están en acción desde principios de septiembre en las regiones de San Petersburgo, Vologda, Tver, Vladimir, Ivanovo y Kostroma. El comienzo de la migración se ha retrasado este año porque las temperaturas
están siendo muy suaves para la época, con un "veranillo de San Miguel" muy marcado.
Hasta el 20 de septiembre las aves anilladas fueron becadas en su mayoría nidificantes locales, ya que son adultos o jóvenes, la mayoría de ellos en muda. A finales de septiembre la migración ha comenzado en serio, de hecho, el número de contactos ha aumentado significativamente para el mismo sitio muestreado alrededor de San Petersburgo, Kostroma o Moscú. El período de luna llena y, además, la ausencia de cobertura de nubes, ha complicado las tareas de captura durante el anillamiento y la tasa de éxito ha sido baja.

En el momento de la redactar este informe, a la luz de los primeros resultados, la proporción de jóvenes parece muy fuerte, para el noroeste ruso es significativamente mayor que el 80%. En Rusia central, con un valor de 73%, está más en la media de los últimos años. La información de las aves anilladas a principios de octubre debe traer información valiosa. La primera década de octubre, con las primeras heladas anunciadas debe ver la migración en pleno apogeo y permitirá muchas más capturas.

Conclusión, una temporada bastante buena en perspectiva

Las llegadas poco significativas de becadas durante la migración de primavera, una serie baja de contactos de machos en croule y un déficit neto de humedad en muchos bosques en abril hacían augurar una temporada de anidación mediocre. Sin embargo, el clima en mayo y junio, con periodos de precipitación alternando con buen tiempo, parecen haber sido bastante propicios para el éxito de cría. En cuanto a la supervivencia en verano, el calor muy moderado de julio y agosto, favoreció claramente la supervivencia de jóvenes y adultos.
Los últimos resultados de las operaciones de anillamiento en Rusia, obviamente confirman esta tendencia, incluyendo una proporción de juveniles fuerte ligada al éxito reproductivo, que sugiere una temporada 2015/16 ligeramente por encima de la media.
Otros factores entran en juego, por supuesto, incluyendo las condiciones climáticas encontradas por las aves durante el largo viaje migratorio que influirá en la precocidad de la invernada en Francia y finalmente las condiciones invernales que por sí mismas tendrán un papel determinante en la distribución y abundancia de becadas.

Yves Ferrand, François Gossmann, Damien Coreau, Claudine Bastat, Soksane Hor et Muriel Lecomt
Réseau Bécasse-Lettre d’information nº24-Octobre 2015

Más información en:

• http://clubnationaldesbecassiers.net/images/stories/news/news-2015-16/info24-10-2015.pdf

Por Miguel Minondo